“¿Cuándo será que mi hijo podrá dejar el pañal ? Ya tiene casi tres años y medio y aún no puede estar sin ellos”, preguntaba su madre a una psicóloga y terapeuta infantil en medio de una charla a la cual asistí hace unos días.

Los pañales son unas de los productos más utilizados durante los primero años de vida del niño y por eso es que se usan para hacer regalos como las tortas de pañales.

Cómo hacer que nuestros hijos dejen el pañal es una de las principales cuestionantes que la mayoría de las madres nos hacemos a partir de que nuestros hijos ya caminan, hablan o presentan cierta independencia. Para que esto suceda los expertos confirman que es necesario que se den estos tres factores, que incidirán en la conducta del niño: Físico, cognitiva y emocional

Primero físico, porque el niño debe poder controlar sus esfínteres, las cuales son músculos de forma circular o de anillo, que permiten o impiden la salida de la orina o las heces fecales. Cognitivo, ya que el niño debe estar en la capacidad de entender en qué consiste el proceso de ir al baño: dónde está el cuarto de baño, para qué se va al baño, el uso del papel higiénico, etc. Emocional, y aquí llegamos a una parte muy importante, donde entra la voluntad del niño de querer ser independiente, entenderse y verse a sí mismo como un niño que está creciendo.

Como madre que desea que tu niño o niña deje el pañal, debes acompañarlo en todo este proceso: ser paciente, no regañarlo cuando ensucie o moje la ropa, conocer cuando está listo para dejar el pañal, y para esto, te aconsejamos que aproveche cada instante, cada momento que pases con tu hijo te permitirá identificar en cual etapa del proceso está y así serás tu misma parte de su aprendizaje.

Una buena forma de iniciar el proceso de dejar el pañal de tu niño consiste en retirárselo por varias horas al día, ponerle una ropa cómoda, que él mismo pueda quitársela fácilmente y decirle, hasta que las aprenda, las palabras claves: “pipí o popo”. Al principio el niño lo dirá durante o luego de hacerlo, pero al pasar los días y verse recompensado con permanecer con una ropa limpia y seca por más tiempo, estará en la capacidad de decirlo antes, lo cual te aseguro los hará muy feliz, tanto a ti como a tu bebé.

Recuerda facilitarle todo al niño, estimularlo positivamente y reconocerlo. No olvides que habrán factores ambientales, sicológicos y

naturales que podrán acelerar o retardar este proceso de independizar a tu niño del uso del pañal.